Salud planea realizar 16,000 evaluaciones de violencia de género en hospitales del 11 al 17 de noviembre.
LOGROÑO, 6 de noviembre. En una decidida acción encaminada a abordar un grave problema de salud pública, la Consejería de Salud y Políticas Sociales, en colaboración con el Servicio Riojano de Salud (SERIS), ha lanzado la V Semana del Cribado de la Violencia de Género (VG), que se llevará a cabo del 11 al 17 de noviembre. Esta iniciativa tiene como meta realizar el mayor número posible de entrevistas breves a usuarios del sistema público de salud, buscando detectar de forma temprana casos de violencia de género, justo antes del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer, que se conmemora el 25 de noviembre. Se ha fijado la ambiciosa meta de alcanzar 16.000 cribados, superando así los 12.000 logrados en la edición anterior.
La encargada de presentar esta nueva edición, la gerente de Atención Primaria, Begoña Ganuza, estuvo acompañada en la rueda de prensa por Manuel Olivares, coordinador Sociosanitario del SERIS, y por Arantza Ruiz García, referente en Violencia de Género. Durante su intervención, Ganuza subrayó el firme compromiso de la institución de ofrecer todos los recursos disponibles para ayudar a aquellas mujeres que atraviesan esta difícil situación, enfatizando que no están solas y cuentan con el respaldo del personal de salud y del sistema público a su disposición para superar estas complejas circunstancias.
En el transcurso de esta Semana del Cribado, a las mujeres de 14 años en adelante que acudan a una consulta de Atención Primaria se les solicitará su consentimiento para participar en una breve entrevista, científicamente validada, que indaga sobre su relación de pareja, la resolución de conflictos y cualquier experiencia previa de violencia que hayan podido sufrir. Además, se alienta a los profesionales de los servicios de atención hospitalaria a sumarse a esta iniciativa, con un enfoque particular en los ámbitos de Salud Mental, Ginecología y Obstetricia, Enfermedades Infecciosas y Urgencias.
El proceso de cribado se lleva a cabo en un ambiente que garantiza la seguridad y la confidencialidad de las mujeres. Es fundamental que los centros de salud se perciban como espacios seguros para tal fin. En los casos en que se identifiquen situaciones de riesgo o presencia de violencia de género, se propone un proceso de intervención y apoyo continuo adaptado a las necesidades de cada mujer, con el fin de acompañarlas en el arduo camino hacia la superación de esta problemática.
El enfoque que se adopta para tratar la violencia de género implica un trabajo en equipo que se caracteriza por ser interdisciplinario, asegurando así una atención continua y coordinada con diferentes instituciones, lo que permite ofrecer un cuidado integral a las mujeres que han sido víctimas de violencia.
Desde antes de 2020, se dispone de un formulario dentro de la historia clínica que los profesionales utilizan al sospechar que puede haber un caso de violencia de género. Durante la Semana del Cribado, este procedimiento se implementa de manera sistemática, debido a su comprobada efectividad en ediciones anteriores. En la última edición, de un total de 12.000 entrevistas realizadas (de las cuales aproximadamente 30.000 se llevan a cabo a lo largo del año), se identificaron seis casos sospechosos para seguir de cerca y 147 casos confirmados de violencia de género. Algunas mujeres fueron excluidas del cribado por diversas razones, entre ellas acudir acompañadas, presentar algún tipo de dolor, o dar una consulta telefónica.
El perfil típico de las víctimas es el de una mujer de entre 20 y 40 años, cuyo agresor suele ser su pareja o ex pareja, y muchas de ellas se encuentran en una situación laboral no remunerada. García ha señalado que una gran proporción de estas mujeres son inmigrantes. El tipo de maltrato más frecuente identificado es el psicológico, aunque también se registran casos de maltrato físico y sexual, que a menudo incluyen componentes psicológicos.
Los profesionales de la salud desempeñan un papel crucial y estratégico en la identificación y asistencia a las mujeres que sufren violencia por parte de sus parejas o exparejas. Frecuentemente, son ellos quienes detectan en primer lugar que una mujer está padeciendo violencia machista, lo que les confiere una responsabilidad significativa para detectar esta problemática y llevar a cabo una atención integral, disponibilidad de recursos tanto sanitarios como sociales del Sistema Público de Salud de La Rioja mediante su labor.
En el ámbito de Atención Primaria, se observa una mayor identificación de casos de maltrato físico, así como de conductas asociadas al maltrato psicológico. Cuando un profesional se encuentra con una mujer que presenta problemas relacionados con su entorno familiar, como ansiedad o depresión, o que muestra signos de hiperfrecuentación, puede empezar a sospechar que estamos ante un posible caso de violencia de género.
En síntesis, la formación continua impartida al personal sanitario y sociosanitario en años recientes resulta fundamental para visibilizar la violencia de género como un factor relevante en la aparición de problemas de salud. Este año, se ha introducido un nuevo formulario destinado a la violencia de género y agresión sexual, complementado con un protocolo específico para casos de agresión sexual.
Este formulario, validado como herramienta, es utilizado para documentar los casos y facilitar a las víctimas el informe que pueden emplear para solicitar asistencia a otras instituciones implicadas en su ayuda.
Finalmente, es de resaltar el compromiso del personal sanitario, cuya participación activa en esta campaña es digna de reconocimiento. Ellos han recibido formación e información previa sobre la forma correcta de ejecutar el cribado, que se realiza con la ayuda de un asistente automático activado por el servicio informático, que guía al profesional a lo largo de la entrevista en el contexto del cribado.
Tags:
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.