Crónica La Rioja.

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Detenido un tudelano tras evadir un control de la Guardia Civil en Calahorra.

Detenido un tudelano tras evadir un control de la Guardia Civil en Calahorra.

La reciente detención de un individuo en La Rioja a manos de la Guardia Civil ha puesto de manifiesto un preocupante comportamiento al volante. El suceso ocurrió el 5 de noviembre, cuando un hombre de 31 años, originario de Tudela en Navarra, decidió hacer caso omiso a un control rutinario establecido para garantizar la seguridad en las carreteras.

Según los informes de la Guardia Civil, el detenido está bajo investigación por un grave delito contra la seguridad vial. Se le acusa de conducir su vehículo, un Audi A3, de forma extremadamente temeraria, poniendo en un alto riesgo la vida y la salud de otros usuarios de la vía pública.

Los hechos se desarrollaron en Cabretón, una pedanía correspondiente a Cervera del Río Alhama, donde las fuerzas del orden habían montado un operativo de verificación de alcoholemia y drogas. Esta medida se implementa con el objetivo de reforzar la seguridad vial y prevenir incidentes que podrían tener consecuencias fatales.

El momento crítico llegó cuando los agentes dieron la orden de detener al conductor del Audi A3. Sin embargo, el hombre ignoró las instrucciones y decidió acelerar bruscamente para escapar, iniciando así una peligrosa persecución a lo largo de la carretera comarcal LR-123. A pesar de las señales visibles y acústicas de la Guardia Civil, el fugitivo continuó su marcha temeraria.

Durante su frenética huida, el conductor violó normas básicas de seguridad vial al invadir constantemente los carriles de sentido contrario, lo que representaba una amenaza inminente para otros conductores. Además, se informa que sobrepasó los límites de velocidad establecidos y realizó maniobras ilegales, tales como adelantamientos indebidos y zigzagueos en la carretera, culminando con la incorporación a la N-113 en dirección a Pamplona sin detenerse ante un cartel de 'Stop'.

A pesar de que los agentes pudieron identificar al conductor durante la persecución, decidieron suspenderla para evitar un agravamiento de la situación, priorizando la protección de los demás usuarios de la vía. Posteriormente, se citó al sospechoso en las dependencias policiales, donde se llevó a cabo su investigación y se recogió su declaración antes de ser puesto a disposición de la autoridad judicial.

Como resultado de estas acciones, el juez ha impuesto una condena de seis meses y 20 días de prisión al infractor, además de la suspensión de su licencia de conducir por un periodo de 10 meses. La Guardia Civil ha recordado que la conducción temeraria está penada según el artículo 380 del Código Penal, que estipula sanciones de prisión de seis meses a dos años, así como la posibilidad de privación del derecho a conducir de uno a seis años.

Este acontecimiento subraya la necesidad de permanecer alertas ante conductores irresponsables, quienes ponen en peligro no solo su vida, sino la de muchos inocentes en las carreteras. La firmeza de la ley y el compromiso de las autoridades son esenciales para mantener la seguridad vial en nuestro país.