La sequía sigue golpeando a La Rioja, ya que los embalses de la región continúan disminuyendo su nivel. Según el informe más reciente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), actualmente se encuentran al 47,03 por ciento de su capacidad, lo que representa una caída del 5,27 por ciento en tan solo una semana.

Los embalses presentan cifras preocupantes, con el embalse de Mansilla al 52,6 por ciento, Pajares al 46,4 por ciento y González Lacasa al 42,1 por ciento. Estos números reflejan la gravedad de la situación y la necesidad urgente de medidas para enfrentar la escasez de agua en la región.

En el caso específico del embalse de Mansilla, que tiene una capacidad de 67,7 hectómetros cúbicos, se encuentra actualmente con 35,6 hectómetros cúbicos, lo que significa que está operando por debajo de la mitad de su capacidad. Estos datos muestran una disminución de 2,74 hectómetros cúbicos en solo una semana.

Por su parte, el embalse de Pajares cuenta con 16,3 hectómetros cúbicos de un total de 35,2 hectómetros cúbicos, lo que indica que ha perdido 2,40 hectómetros cúbicos en los últimos siete días. A pesar de esta disminución, en comparación con el año anterior, el embalse cuenta con 7,33 hectómetros cúbicos más.

Finalmente, el embalse de González Lacasa también muestra una reducción significativa, pasando de 16,45 hectómetros cúbicos a 13,9 hectómetros cúbicos en una semana. Esto significa que está operando al 42,1 por ciento de su capacidad total de 32,9 hectómetros cúbicos. Estos datos reflejan la urgencia de tomar medidas para hacer frente a la sequía que afecta a La Rioja.