Crónica La Rioja.

Crónica La Rioja.

Héroes del fuego rescatan por ventana a mujer de 55 años, reanimada por su hijo de 11.

Héroes del fuego rescatan por ventana a mujer de 55 años, reanimada por su hijo de 11.

LOGROÑO, 15 de diciembre. En una situación de emergencia que resalta la importancia de la comunidad y la intervención efectiva de los servicios de emergencia, los Bomberos de Logroño llevaron a cabo esta tarde un rescate en condiciones inusuales. Una mujer de 55 años que sufría una indisposición fue evacuada de su hogar a través de la ventana por los efectivos de rescate, luego de que su hijo menor, un niño de solo 11 años, ya hubiera tratado de reanimarla antes de la llegada de los profesionales.

Los detalles proporcionados por el Ayuntamiento de Logroño indican que la mujer había enfrentado problemas médicos anteriormente, lo que subraya la preocupación por su salud. A la hora del incidente, en su domicilio ubicado en la calle Duques de Nájera, fue su propio hijo quien, con admirable valentía para su corta edad, le practicó la reanimación cardiopulmonar, tomando un rol activo en una situación que podría haber tenido graves consecuencias.

El niño, tras haber hecho todo lo posible en un momento de alta tensión, se vio en la necesidad de contactar a los servicios de emergencia. Tanto la Policía Local como los equipos sanitarios llegaron rápidamente al lugar para hacerse cargo de la situación. Sin embargo, se encontraron con un obstáculo inesperado: la configuración de las escaleras del edificio dificultaba el acceso para evacuar a la mujer en camilla, lo que incrementó la urgencia del rescate.

Frente a esta desafiante situación, se solicitó la intervención de los Bomberos. Utilizando una escalera grande, pudieron finalmente trasladar a la mujer a través de la ventana, garantizando su evacuación con la precaución necesaria. Posteriormente, la enferma fue llevada al Hospital San Pedro de Logroño para recibir la atención médica que requería con urgencia.

Las autoridades municipales han informado que tras el traslado de la madre, fue necesaria una segunda intervención, esta vez focalizada en el bienestar del niño que había permanecido solo en la vivienda. Dado que ambos viven en la ciudad sin demasiados familiares cercanos, y el próximo familiar disponible no llegaría hasta el día siguiente, el menor fue puesto temporalmente bajo el cuidado de los servicios sociales, asegurando así su bienestar hasta que se resolviera la situación familiar.