Increíblemente, la jornada laboral de estos trabajadores se extendía hasta 14 horas en muchos casos, una situación realmente alarmante que ha sido descubierta por agentes de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja en Logroño.

Esta investigación ha culminado con la detención de un hombre y una mujer por su presunta participación en un Delito Contra los Derechos de los Trabajadores, donde se aprovecharon de la precaria situación de estas personas, que no contaban con permisos de residencia ni de trabajo.

Estos individuos eran obligados a trabajar largas jornadas de hasta 14 horas diarias, sin contrato laboral y sin cobrar sus salarios durante varios meses, dejando claro el abuso y la explotación a la que fueron sometidos.

Los afectados, cuatro en total, carecían de autorización para residir y trabajar en España, y habían sido empleados por una empresa de construcción en Logroño, donde se les adeudaban grandes sumas de dinero, llegando a deberle a uno de ellos la cantidad de 3.200 euros.

En un principio, se les prometió una jornada laboral de 8 horas con la posibilidad de hacer horas extras remuneradas, algo que nunca se cumplió. Las jornadas se extendían desde las 8 de la mañana hasta las 22 horas, sin pagar las horas extra y con apenas 15 minutos de descanso para comer.

Además, los empleadores no proporcionaban ningún tipo de equipamiento de seguridad, obligando a los trabajadores a costearlo por su cuenta. Los pagos se realizaban en efectivo, sin dejar rastro, y tampoco se cumplían con las horas extraordinarias ni las pagas adicionales establecidas por ley.

El hombre y la mujer detenidos, de 50 y 41 años respectivamente, se enfrentan ahora a consecuencias legales por su presunta implicación en este delito, siendo especialmente preocupante los antecedentes del hombre, con 11 cargos previos incluyendo estafas.