En un impactante giro de los acontecimientos, el conductor involucrado en el trágico atropello múltiple que tuvo lugar en Suesa el pasado abril ha admitido su culpabilidad durante el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Cantabria. Este incidente, que dejó un saldo devastador de tres víctimas mortales, ha culminado en una condena que él mismo ha aceptado, sumando cinco años y nueve meses de prisión a su ya complicada situación legal.

SANTANDER, 4 de noviembre. El juicio, que se llevó a cabo con un acuerdo entre las partes involucradas, permitió que Jaime A.F., responsable del siniestro, reconociera su error. El fiscal y las acusaciones particulares, al inicio de la vista, decidieron modificar sus demandas iniciales, que oscilaban entre seis y nueve años de cárcel, lo cual permitió que el procesado accediera a una pena que incluye también una orden de alejamiento de siete años respecto al camping donde residían las víctimas en el momento del accidente.

Durante su declaración, Jaime A.F., que contaba con 73 años al momento de los hechos y era vecino del municipio donde ocurrió la tragedia, expresó su profundo arrepentimiento, pidiendo perdón de manera directa a las familias de las víctimas presentes en la sala. Su declaración fue profundamente emotiva, manifestando: “Quiero mostrar mi total y absoluto arrepentimiento por los hechos que han sido leídos y pedir perdón a las víctimas y a sus familiares”, en un acto que refleja el peso moral que esta situación conlleva.

Desde el comienzo del juicio, la Fiscalía, junto con los abogados de las víctimas, hizo un cambio significativo en su enfoque, decidiendo rebajar las penas solicitadas para el acusado que, desde agosto del año anterior, ha estado bajo prisión provisional. La defensa, que inicialmente buscaba la absolución de su cliente, también se sumó a esta nueva estrategia, llegando a un consenso que abarcará una prohibición de conducir vehículos por un periodo de nueve años; esta medida equivale, en la práctica, a la revocación de su licencia de conducir de forma permanente. La aseguradora del vehículo se ha hecho cargo de las indemnizaciones, alcanzando un total cercano a un millón de euros, mientras que se impondrán las costas a la acusación particular.

El accidente se produjo a las ocho de la tarde del 4 de abril de 2023, cuando A.F. perdió el control de su automóvil, saliéndose de la vía en la CA-433. Se reveló que el conductor superaba los límites de velocidad establecidos, circulando a 79 km/h en un área restringida a 50 km/h. Además, su nivel de alcohol en sangre era casi tres veces superior al permitido.

Es relevante mencionar que desde abril de 2016, A.F. tiene un 65 por ciento de discapacidad reconocida. Durante el análisis posterior al accidente, se detectó la presencia de medicamentos para la depresión en su organismo; no obstante, según la forense que realizó la evaluación, esta medicación no tuvo impacto en la cadena de eventos que llevaron al trágico incidente.

Las víctimas, quienes se encontraban caminando por un paseo peatonal cercano al camping donde se hospedaban, perdieron la vida de manera instantánea. También hubo que lamentar la muerte de la mascota de una de las familias, así como lesiones en otra mujer que colisionó con el vehículo de A.F. en el trágico suceso.

Finalmente, cabe destacar que Jaime A.F. ha sido condenado por tres delitos de homicidio por imprudencia grave, un delito de lesiones por imprudencia grave, otro por conducir de manera temeraria y un último cargo por conducir bajo los efectos del alcohol. Este juicio, que estaba previsto para extenderse hasta el miércoles siguiente, concluyó sorpresivamente en una única sesión, gracias al acuerdo logrado entre las partes para evitar la presentación de más pruebas que prolongaran el proceso.