Crónica La Rioja.

Crónica La Rioja.

La UR enfatiza el papel crucial de las universidades en la erradicación de la violencia de género.

La UR enfatiza el papel crucial de las universidades en la erradicación de la violencia de género.

LOGROÑO, 25 Nov. - En un acto reciente, la Universidad de La Rioja (UR) ha enfatizado la vital "responsabilidad" que tienen las universidades como "motor de cambio" en la lucha por una sociedad "más justa y libre de violencia machista". Este mensaje resuena en el contexto del 25N, el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, subrayando la urgencia de la causa.

El manifiesto correspondiente fue leído por las alumnas Maria Dolores García Nalda y Concepción Martínez Herreros, de la Universidad de la Experiencia, en un evento organizado por el Vicerrectorado de Responsabilidad Social Corporativa junto con la Unidad de Igualdad e Inclusión de la UR. Esta acción es un reflejo del compromiso institucional con una problemática tan crítica.

El documento señala que "nuestro deber es propiciar espacios de debate profundo y favorecer la investigación crítica sobre los impactos que tiene la violencia machista", reiterando que este problema no solo afecta a las esferas privadas, sino que también tiene presencia en entornos académicos.

Se ha recordado que, a lo largo de los años, ha habido avances significativos en la concienciación social acerca de la violencia contra las mujeres. Gracias a casos mediáticos y campañas impactantes, el rechazo generalizado hacia esta violencia ha crecido. Sin embargo, queda aún un largo camino por recorrer y el papel de las universidades es fundamental en este proceso.

El ambiente educativo que se vive en las universidades se considera "un contexto inigualable" para investigar las causas subyacentes de la violencia que afecta la salud física, sexual y psicológica de las mujeres, impactando así en su educación, empleo y futuro. Esto resalta la importancia de la investigación académica en la búsqueda de soluciones efectivas.

El manifiesto de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) subraya que el ámbito universitario es "idóneo para diseñar e implementar campañas de sensibilización" contra la violencia, así como para desarrollar acciones comunicativas que expongan las manifestaciones de violencia machista que, lamentablemente, aún se encuentran normalizadas en nuestra sociedad.

Además, se han señalado desafíos que las instituciones académicas deben enfrentar para potenciar su papel preventivo, que deben ir de la mano con el debate y la reflexión académica sobre la justicia restaurativa. Es crucial trabajar en la reparación y en la creación de mecanismos de apoyo destinados a evitar que se repitan estos actos de violencia.

En este sentido, se ha puesto de relieve que para que las universidades desempeñen efectivamente su rol social, es imperativo contar con formación específica en perspectiva de género a todos los niveles. Este enfoque debe abarcar tanto a quienes toman decisiones en la administración como a los educadores e investigadores, quienes tienen la responsabilidad de promover la igualdad entre hombres y mujeres y de trabajar para erradicar la violencia de género.

De acuerdo a datos proporcionados por Naciones Unidas, se estima que a nivel mundial, casi una de cada tres mujeres ha sido víctima de violencia física y/o sexual en algún momento de su vida. En el trágico nótese de 2023, alrededor de 51,100 mujeres y niñas perdieron la vida a manos de familiares o parejas, mientras que en España se reportaron 58 asesinatos de mujeres, y en lo que va de 2024, ya han sido 40 las víctimas mortales, dejando 30 menores huérfanos.

La Universidad de La Rioja, consciente del impacto de tales cifras devastadoras, se ha comprometido con la campaña de la ONU para 2024, cuyo lema es 'Cada 10 minutos se asesina a una mujer. #NoHayExcusa. ÚNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres'. Este compromiso refleja su determinación de erradicar la impunidad y de llevar a cabo acciones que aseguren los derechos de mujeres y niñas, enfocándose especialmente en crear un entorno universitario seguro.

Este compromiso, aseguran, seguirá siendo el pilar fundamental alrededor del cual la universidad estructurará todas sus acciones para identificar y abordar las violencias de género en entornos académicos. Esto incluirá fomentar la escucha, el acompañamiento y la reparación a las mujeres afectadas, aplicando siempre la perspectiva de género, la interseccionalidad y la diversidad en todos sus programas.