LOGROÑO, 24 de junio. El festival 'Gran Reserva', celebrado el pasado fin de semana en Calahorra, ha culminado sin incidentes importantes, a pesar de atraer a una multitud cercana a los 10.400 asistentes.

Un informe de la Guardia Civil revela que se realizaron 1.200 identificaciones y se incautó un lote de alimentos en condiciones precarias. Este despliegue de medidas de seguridad tuvo lugar en los días 20 y 21 de junio, con el propósito de garantizar la tranquilidad y el orden durante el evento.

Los agentes del Instituto Armado llevaron a cabo un amplio operativo, que abarcó la prevención de delitos como el tráfico y consumo de drogas, así como la restricción del acceso a armas prohibidas. Gracias a la meticulosa coordinación entre las diversas fuerzas de seguridad y emergencias, la celebración transcurrió sin contratiempos significativos.

Un total de 250 efectivos de la Guardia Civil, que incluían especialistas en seguridad ciudadana, tráfico, antiterrorismo y detección de sustancias, estuvieron presentes para asegurar el bienestar de los asistentes. El uso de tecnología avanzada, drones y perros de detección también contribuyó a mantener la seguridad durante el evento.

La colaboración con los servicios municipales, entre ellos la Policía Local y unidades de emergencia, resultó clave para establecer un modelo de cooperación que priorizara la protección de todos los asistentes.

Durante estos dos días, se identificaron cerca de 1.200 personas y se inspeccionaron casi 1.400 vehículos de diversas procedencias, lo que subraya la efectividad del operativo. En términos de seguridad ciudadana, se cursaron varias denuncias, incluidas cinco relacionadas con drogas y otras por incumplimiento de la autoridad.

Asimismo, en el ámbito del tráfico, la Guardia Civil llevó a cabo 873 pruebas de alcoholemia, de las cuales siete resultaron positivas. Además, se realizaron 29 pruebas de drogas, con ocho positivos detectados, destacando la prontitud con la que se actuó ante posibles riesgos.

Un episodio notable se produjo cuando los agentes interceptaron un vehículo con un conductor que transportaba una cantidad considerable de alimentos en estado deficiente. Esta mercancía, que no cumplía con las condiciones mínimas de higiene, fue retirada para evitar que los asistentes al festival corrieran el riesgo de intoxicaciones alimentarias.

La conclusión del Festival Gran Reserva sin alteraciones ni incidentes serios es testimonio del éxito de la planificación y coordinación desplegadas. Este evento demuestra que, mediante una adecuada estrategia preventiva y la efectividad en la respuesta, es posible asegurar la tranquilidad en celebraciones de gran envergadura.

Desde la Guardia Civil, se ha hecho hincapié en agradecer la colaboración de los asistentes y la labor conjunta con la policía local y demás servicios de emergencia que hicieron posible el buen desarrollo del festival en Calahorra.