LOGROÑO, 29 de noviembre.

En un escenario de creciente importancia para las regiones de España, la consejera de Presidencia de Cantabria, Isabel Urrutia, ha enfatizado la urgencia de que el Comité de las Regiones adquiera un "nuevo impulso" y adopte una postura más participativa y decisoria. Esta declaración responde a la preocupación acerca de un posible "desvío" hacia el este de Europa, resultado de la introducción de nuevos miembros en la Unión Europea, lo que podría dejar a España en una posición de menor relevancia.

Urrutia ha manifestado que el desafío clave para la Delegación Española radica en "hacernos oír y sentir" en un entorno europeo donde las decisiones afectan directamente a las comunidades autónomas. Es imperativo que las políticas europeas se formulen considerando las realidades y necesidades locales.

Estas apreciaciones fueron compartidas por la consejera durante un evento en Logroño, donde estuvo acompañada por el consejero de Hacienda, Gobernanza Pública, Sociedad Digital y Portavocía del Gobierno de La Rioja, Alfonso Domínguez. El evento conmemoraba el 30º aniversario del Comité Europeo de las Regiones, un órgano consultivo de gran relevancia en la estructura comunitaria.

Isabel Urrutia valoró la importancia de dicha reunión, señalando la necesidad de identificar los "nuevos retos" que las comunidades autónomas deberán enfrentar en el marco de la Unión Europea. En su intervención, realizó un llamado a abordar las "complicaciones" que se avecinan y que impactarán tanto a las comunidades autónomas como a las localidades en la próxima década.

La consejera subrayó el papel crucial de las comunidades autónomas, y en particular, el de Cantabria y La Rioja, resaltando las similitudes relacionadas con sus municipios. Destacó que Cantabria cuenta con 102 municipios, de los cuales 97 tienen menos de 20,000 habitantes, lo que evidencia la necesidad de abordar la problemática de la despoblación y los recursos necesarios para esos territorios.

Sin embargo, indicó que los desafíos en el contexto de la Unión Europea se intensificarán con la posible adhesión de nuevos estados miembros. Esta situación podría provocar que el enfoque de la UE se desplace hacia el este, relegando a las naciones del occidente europeo a un segundo plano. Por lo tanto, Urrutia enfatizó la necesidad de que España asuma un papel más destacado en este escenario, impulsando activamente la voz de las comunidades autónomas.

La consejera de Presidencia dejó claro que "no se pueden tomar decisiones a miles de kilómetros de dónde se van a ejecutar esas políticas". Es imperativo que la distribución de fondos sea equitativa y que las comunidades autónomas no resulten perjudicadas en un contexto en el que habrá más miembros y, eventualmente, más recursos.

A pesar de los desafíos, Urrutia detecta también oportunidades significativas para posicionar a España como un país estratégico en temas cruciales como la política migratoria y la defensa del Mediterráneo. En cuanto al futuro de la Unión Europea, expresó un optimismo cauteloso, sugiriendo que el éxito dependerá de que se "sepa jugar y conseguir" las condiciones adecuadas para que tanto España como las comunidades autónomas se conviertan en una voz influyente en el continente.

Asimismo, la consejera hizo hincapié en la necesidad de una clara visión sobre el rumbo que tomará la UE, algo que, en su opinión, no se había contemplado debidamente en los años anteriores. Sin embargo, recalca que la nueva presidencia de la Unión se está enfocando en cuestiones esenciales como la defensa y la seguridad territorial, especialmente en un contexto marcado por la guerra en Ucrania, un conflicto que, según Urrutia, está redefiniendo muchas de las prioridades europeas.

Por todas estas razones, la consejera aboga por una transformación en el Comité de las Regiones, de modo que se convierta en un órgano más participativo y decisorio en la formulación de políticas que afecten a las regiones europeas. Es fundamental que la voz de los territorios se escuche y se tome en consideración en las decisiones que se tomen a nivel europeo.

Por su parte, el consejero de La Rioja, Alfonso Domínguez, ha resaltado la unión que existe entre Cantabria y La Rioja, aludiendo a "muchos intereses comunes en la UE", tales como los Fondos Europeos y la problemática de la protección del lobo, que está generando serias consecuencias negativas al norte del Duero y en toda España.

"Lo que hacemos aquí en la delegación española es reflexionar sobre los próximos retos que afrontan las regiones y las entidades locales de España y de toda Europa", afirmó Domínguez, destacando la relevancia de este nuevo contexto en la Unión Europea, que cuenta con un nuevo Parlamento y una nueva Comisión. Todo ello marcará el inicio de un nuevo periodo en el Comité de las Regiones, donde las políticas tienen un impacto diario en la vida de los ciudadanos de La Rioja y del resto de comunidades autónomas.

Finalmente, Domínguez mencionó que se abordaron políticas medioambientales, digitalización, el nuevo marco financiero, la PAC, los fondos de cohesión, la financiación y regulaciones, subrayando que la reunión de este viernes ha supuesto una oportunidad valiosa para preparar a la delegación española para los nuevos tiempos que se avecinan en la Unión Europea.