LOGROÑO, 12 Jul. - El Ayuntamiento de Logroño eliminará el actual carril bici a contraflujo de Avenida de Portugal y elaborará un nuevo proyecto que prevé el traslado de esta infraestructura a calles adyacentes, como Bretón de los Herreros o Gran Vía. Además, en esta misma vía, repondrá aparcamientos y soterrará los contenedores.
Así lo ha avanzado este miércoles la portavoz del equipo de Gobierno municipal, Celia Sanz, tras la habitual rueda de prensa en la que ha dado cuenta de los asuntos aprobados en la Junta de Gobierno Local.
Una decisión sobre una de las calles que ya se había adelantado que se iba a revisar, y respecto a la cual, ayer mismo se celebró en el Consistorio una reunión con vecinos, comerciantes y afectados tras su remodelación, en el anterior mandato local.
"Fue un encuentro fructífero -ha asegurado Sanz- en el que se practicó una escucha activa y se alcanzaron una serie de compromisos. El primero y principal es revertir el carril bici de Avenida de Portugal. También se van a recuperar los aparcamientos eliminados en esa zona y soterrar los contenedores, que es una actuación que estaba aprobada, adjudicada, pero que no se ejecutó en plazo".
La reversión del carril bici, como ha profundizado la portavoz, supone "que se va a quitar y se va a buscar una alternativa". Para ello, se va a llevar adelante un nuevo proyecto "para que la calle vuelva a tener una lógica de circulación y el carril bici se va a estudiar la proyección alternativa pero lo que se va a hacer es quitar de esa calle".
Entre esas alternativas, "buscaremos lo más sensato contando con el resto del carril que ya está ejecutado, no hay solo una opción", pero ha recordado que el PP ya llevaba en su programa el posible traslado del carril bici a Gran Vía o a Bretón de los Herreros, si bien ha recalcado que "no se trata de quitar y poner fichas, o que un equipo de Gobierno la ponga aquí y el otro en otro sitio, lo primero es el consenso y las demandas de los afectados.
"Además, se va a buscar también la seguridad en la circulación, cosa que entendemos que ahora no se estaba garantizando con el carril a contraflujo o con ciertas dificultades que han tenido ambulancias o coches de policía", ha puesto como ejemplo Sanz, quien ha insistido en que "se trata de revisar un proyecto para dar, primero, atender las necesidades reales de la ciudad y en segundo lugar garantizar la seguridad".
En cuanto a posibles plazos, la portavoz municipal ha apuntado como "lo más inmediato" la recuperación de los aparcamientos "que es la mayor demanda que existe en estos momentos", que se podría hacer "con un coste mínimo"; y el soterramiento los contenedores, "que es un tema que ya está adjudicado y que debería estar incluso hecho desde diciembre de 2022, incluso antes que el carril bici", en el que ha señalado que "no tendría más coste, está resuelto".
Para el nuevo proyecto de carril bici, por su parte, ha calculado que podría estar "aproximadamente para después de San Mateo", mientras que, en el caso de su coste económico, Celia Sanz ha explicado está sobre la mesa de los técnicos para estudiar cuál es la alternativa más viable, de momento no se puede cuantificar, pero lo que sí que les puedo decir es que intentaremos que sea el proyecto que resulte más económico para las arcas municipales, porque al final es dinero público".
En cuanto a la repercusión de un cambio en esta calle en las subvenciones que el proyecto recibió de Fondos Europeos -algo que el Gobierno local señaló ayer mismo que podría dificultar las modificaciones, ya que están pagadas las ayudas y hay un compromiso de plazo de mantenimiento de los trabajos-, la portavoz ha recordado que "lo que Europa hace cuando subvenciona un proyecto es hacerlo en base a unos objetivos".
"Entonces nosotros entendemos que es de sentido común, que si esos objetivos se siguen cumpliendo, que es apostar por un proyecto que sea más peatonal, que haya una sostenibilidad en la circulación, que haya una baja de emisión en cuanto a contaminación, entendemos que a Europa, si esos objetivos se cumplen rigurosamente, no va a haber que hacer una modificación sustancial de lo que ya está aprobado, sino que es ofrecer una alternativa pero manteniendo esos objetivos", ha relatado Sanz.
Así, ha incidido en que "nosotros vamos a trabajar con rigurosidad precisamente porque insisto en que no se trata de un quita y pón, no estamos hablando de que un gobierno quita, otro pone, otro quita, sino que estamos hablando de que se pueden buscar alternativas que cumplan esos objetivos europeos y que desde luego mantengan al máximo posible esas subvenciones que ya están concedidas".
"¿Que es complicado? Sí, pero eso no quiere decir que sea imposible y desde luego les puedo asegurar que nosotros queremos trasladar esa solvencia y esa rigurosidad porque nuestras prioridades van a ser que la ciudad de Logroño gane y que los logroñeses no pierdan dinero", ha concluido.
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