LOGROÑO, 7 de enero.

El pasado 6 de enero, se registró un incidente significativo en la carretera autonómica LR-113, donde se produjo un desprendimiento de rocas en el kilómetro 34,900, lo que ha llevado a que uno de los carriles en dirección a Burgos se encuentre cerrado al tráfico desde entonces.

En respuesta a esta situación, se ha implementado un sistema de paso alternativo para los vehículos, permitiendo el uso del carril que se dirige hacia Anguiano. Las autoridades competentes han instalado las debidas señales de advertencia para informar a los conductores sobre el corte de tráfico, enfatizando la importancia de la seguridad en la carretera.

Durante el día de hoy, expertos estarán evaluando la magnitud de los daños causados por el desprendimiento, con el fin de desarrollar soluciones que aseguren la continuidad de la circulación y la seguridad vial en la ruta afectada.

Afortunadamente, el talud en cuestión contaba con una malla de protección, lo que ha sido clave para evitar que la carretera quedara completamente intransitable. Este hecho pone de manifiesto la efectividad de los sistemas de retención en la prevención de incidentes más graves.