Una vez más, la Guardia Civil ha puesto en evidencia la peligrosa conducta de un conductor en las carreteras españolas. En esta ocasión, un individuo ha sido investigado por circular a una velocidad desorbitada de 172 kilómetros por hora en la N-232, desafiando los límites establecidos y poniendo en riesgo su vida y la de los demás usuarios de la vía.

La coordinación entre la Jefatura Provincial de Tráfico en La Rioja y el Sector de Tráfico del Instituto Armado ha sido fundamental para llevar a cabo la investigación sobre este presunto delito contra la seguridad vial. El conductor, un varón de 59 años residente en Sevilla, fue detenido tras ser detectado por un cinemómetro de la Benemérita en el punto kilométrico 449,400 de la N-232, circulando a más del doble de la velocidad permitida.

Las consecuencias legales para este individuo podrían ser graves, ya que se enfrenta a un presunto delito contra la seguridad vial, tipificado en el artículo 379 del Código Penal. Esto podría acarrear penas de prisión, multas e incluso la privación del derecho a conducir vehículos a motor durante varios años.

La Estrategia de Seguridad Vial adoptada por la Dirección General de Tráfico (DGT) ha establecido la reducción de la siniestralidad en las carreteras como una prioridad para el decenio 2021-2030. Los controles de velocidad llevados a cabo por la Guardia Civil son parte fundamental de esta estrategia, ya que los excesos de velocidad son una de las principales causas de accidentes de tráfico y de la gravedad de las lesiones sufridas en los mismos.

Es importante recordar que los dispositivos de control de velocidad se realizan en toda la provincia de La Rioja durante las 24 horas del día, especialmente en aquellos tramos de carretera que presentan un mayor riesgo de accidentalidad. La seguridad vial es responsabilidad de todos, y es fundamental respetar los límites de velocidad para evitar tragedias en las carreteras españolas.