Durante el pasado fin de semana, la Policía Local de Logroño llevó a cabo una intensa labor de control y vigilancia, resultando en la imposición de un total de 65 denuncias por diversos incumplimientos de las ordenanzas municipales vigentes.

Entre los delitos más comunes, destaca el consumo de alcohol en la calle, con 31 denuncias registradas. Este hecho subraya la creciente preocupación por la conducta de los ciudadanos que ignoran las normativas que garantizan la convivencia y el orden público en nuestra ciudad.

Asimismo, 18 denuncias fueron relacionadas con individuos que decidieron orinar en la vía pública, lo que refleja una falta alarmante de civismo y respeto por el espacio compartido, esencial para la calidad de vida de todos los vecinos. Además, se registraron 4 denuncias por gritos en la calle y otras 4 por generarse ruidos molestos desde domicilios, lo que concierne a los derechos de aquellos que buscan un entorno tranquilo y ordenado.

Es importante también mencionar que se cursaron 2 denuncias por otros actos incívicos que causan suciedad y daños a la propiedad pública, reforzando la necesidad de concienciar a la ciudadanía sobre el cuidado del entorno.

Por si fuera poco, se añadieron 6 denuncias bajo la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, de las cuales 4 correspondieron a tenencia de sustancias estupefacientes, una por desobediencia a la autoridad y otra más por alteración del orden público. Estos datos son una clara muestra del desafío que enfrenta la seguridad en la ciudad y la necesidad de seguir trabajando para mantener la legalidad y el respeto que todos merecemos.