LOGROÑO, 2 de noviembre.

El Ministerio Público ha solicitado una pena de nueve años y medio de prisión para I. M. N., un joven de 26 años originario de Errenteria, en Guipúzcoa, al acusarlo de intento de homicidio tras un violento altercado en Nájera. Además, se le exige una compensación de 3.035 euros para la víctima, sumando otros 4.169,27 euros por los daños ocasionados.

El proceso judicial se llevará a cabo el próximo martes, 4 de noviembre, a las 09:30 horas. Los hechos, según el documento al que tuvo acceso Europa Press, ocurrieron a las 5:00 horas del 28 de enero de 2024 en la calle Mártires de Nájera.

El incidente comenzó cuando el acusado impactó primero con la víctima y luego con su pareja. A raíz de este choque, surgió una discusión que desembocó en una pelea. Durante este enfrentamiento, ambos cayeron al suelo, momento que el imputado aprovechó para apuñalar a la víctima con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones, expresando su intención de acabar con su vida al propinarle dos puñaladas en el costado izquierdo.

Finalmente, tras ser separados por testigos que se encontraban en las cercanías, la víctima se dio cuenta de que su ropa estaba manchada de sangre y descubrió las dos heridas en su costado izquierdo, sintiendo de inmediato dificultad para respirar.

Como consecuencia de esta agresión, la víctima sufrió múltiples lesiones que requirieron tres días de hospitalización en estado grave, seguidos de 24 días en situación moderada y otros 7 en básico. Actualmente presenta dos cicatrices: una de 4 centímetros de longitud de aspecto rojizo en la zona retro axilar, y otra de 1 por 2 centímetros en la zona lateral del costado izquierdo, a la altura de C5-C6.

El informe del Ministerio Público destaca que la ubicación de las lesiones y el tipo de arma empleada, considerado como especialmente peligroso, implican un riesgo vital considerable. Indica que los órganos vitales, como pulmones y corazón, pudieron haber estado en peligro, lo que podría haber derivado en la muerte de la víctima.

El Fiscal considera que estos actos constituyen un intento de homicidio, por lo que ha solicitado una condena de nueve años y medio de prisión, así como una compensación total de 7.204 euros por responsabilidad civil, de los cuales 3.035 euros corresponden a la indemnización de la víctima y 4.169 euros por las lesiones sufridas.