LOGROÑO, 24 de septiembre.

La agrupación Marea Blanca en La Rioja ha expresado hoy su grave preocupación por la situación crítica que atraviesa la Unidad del Dolor, que enfrenta un estado de colapso debido a una espera que alcanza hasta los once meses para una cita. Actualmente, más de 1.200 pacientes se encuentran en una lista de espera que parece interminable.

En un comunicado, la organización ha subrayado la importancia vital de la Unidad del Dolor para los pacientes, señalando que el retraso en el tratamiento no solo intensifica el sufrimiento físico, sino que también tiene un impacto negativo significativo en el bienestar psicológico de los afectados.

Marea Blanca ha indicado que esta unidad debería contar con al menos cinco anestesistas para ofrecer una atención adecuada a los pacientes, sin embargo, en la realidad solo hay uno dedicado específicamente a esta área. Esta situación está comprometiendo seriamente la calidad del cuidado que se puede brindar.

Según los representantes de Marea Blanca, la decisión de la consejera de Salud, María Martín, de redistribuir a los otros anestesistas para atender las listas de espera en quirófano ha llevado a un desbordamiento en la Unidad del Dolor, lo que resulta inaceptable para una atención sanitaria digna.

La agrupación ha instado al Gobierno regional a actuar con urgencia, aumentando el número de anestesistas asignados a esta unidad y reforzando también el personal de enfermería, para atender adecuadamente la creciente demanda de pacientes.

Por último, han destacado que el proceso de acceso a la Unidad del Dolor es engorroso, ya que solo se puede acceder a través de un referido de otro especialista, lo que incrementa aún más los tiempos de espera desde la primera visita al centro de salud.