LOGROÑO, 14 de abril.

En la jornada de hoy, un grupo de manifestantes se reunió frente a la Delegación del Gobierno en La Rioja para expresar su apoyo a la instauración de una "tercera República" en España. Este evento fue convocado por Izquierda Unida (IU) y el Partido Comunista de España (PCE), bajo el lema 'Por la III República'.

Los asistentes a la concentración mostraron su descontento con la monarquía actual mediante consignas que criticaban a la familia Borbón. Entre los gritos destacados se escucharon frases como "No hay dos sin tres, República otra vez" y "España, mañana será republicana".

Antes de que comenzara la manifestación, Henar Moreno, portavoz de IU en el Parlamento de La Rioja, declaró que existe un amplio sector de la población que demanda una elección democrática de su Jefe del Estado, considerándolo un derecho fundamental en una sociedad democrática.

Moreno argumentó que la figura del Jefe del Estado, actualmente inviolable, genera una sensación de impunidad, señalando que la falta de mecanismos legales para investigar actos de corrupción, como los que han afectado al rey emérito, es un claro indicativo de que la monarquía debe ser cuestionada. "Lo prioritario es avanzar hacia una democracia real", añadió.

La portavoz también enfatizó que las heridas del pasado franquista han conducido a la aceptación de la monarquía actual, planteando que dicha institución es, en esencia, un legado de dicho régimen y, por tanto, es esencial luchar por una tercera república.

En un momento en que se habla de rearme, Moreno hizo hincapié en la necesidad de revalorizar los principios republicanos, tales como la libertad, la igualdad y la justicia social, así como la búsqueda de la paz en la sociedad.

"Sin paz, no hay igualdad, y sin igualdad, no hay justicia social", subrayó, abogando por un aumento en el gasto social y en los derechos para todos los ciudadanos, así como por una educación pública que garantice la igualdad de oportunidades.

Para concluir, Moreno advirtió sobre el creciente desencanto hacia la monarquía, a pesar de que ciertos medios de comunicación, bajo el control de magnates, perpetúan una narrativa que busca mantener el actual estado de las cosas y desestimar la importancia de situar los derechos sociales como una prioridad.