En un contexto de creciente inquietud en Europa, el Foro Social de La Rioja ha decidido alzar su voz en contra del reciente impulso hacia el rearme militar en la región. Durante una rueda de prensa celebrada en Logroño, su portavoz, Julio Martínez, expresó su descontento con un mensaje contundente: “No serán los hijos de Ursula von der Leyen ni de Pedro Sánchez quienes vayan a la guerra”.

Este grupo, que aboga por la paz y la no violencia, se manifestará el 3 de abril en el Espolón de Logroño para expresar su rechazo a las decisiones que consideran erróneas y peligrosas. Martínez enfatizó que, aunque se intenta presentar el rearme como necesario y beneficioso, hay una manipulación de la opinión pública para justificar estas acciones bélicas.

Las declaraciones de Martínez subrayan una preocupación creciente respecto a lo que calificó de "deriva militarista" que se ha intensificado en Europa. En su discurso, llamó a revitalizar el compromiso con los valores de la paz, la igualdad y el respeto a los derechos humanos, argumentando que la guerra sólo traería pérdidas y que la población no debería sacrificar ni su dinero ni sus vidas en conflictos que no les conciernen.

El Foro Social defiende que la verdadera seguridad no proviene de armamentos, sino de derechos esenciales como la educación, la sanidad, unas pensiones dignas y políticas inclusivas. Para ellos, estos son los pilares que garantizan una vida digna y plena, alejados de la devastación que representa el militarismo.

A su juicio, la paz se construye a través del diálogo y una política constructiva, no a través de la intimidación ni la fuerza. Martínez recalcó que no debe resignarse a un futuro de guerra y que la idea de que más armas aporten libertad es completamente errónea.

Con un llamado a una mayor responsabilidad y a la implementación de políticas audaces, Martínez concluyó resaltando que la estrategia del miedo, utilizada para justificar el rearme, es una manipulación que no debe ser aceptada por la sociedad. La promoción de una cultura de paz, según su crítica, es más fundamental que nunca.