En medio de la intensa ola de calor que ha asolado la región, el Ayuntamiento de Logroño se ha visto obligado a suspender varios espectáculos programados en su Auditorio, una decisión que ha levantado el debate sobre la gestión de las instalaciones municipales.

La portavoz del Gobierno local, Celia Sanz, explicó que esta medida se tomó siguiendo una "recomendación de salud pública", ya que los problemas de refrigeración en el Auditorio no son nuevos, sino que llevan más de cuatro años afectando el correcto funcionamiento del espacio. A pesar de los esfuerzos del Ayuntamiento por encontrar soluciones, Sanz reconoció que los sistemas de enfriamiento están obsoletos y presentar dificultades técnicas para su reparación.

Durante una rueda de prensa, la portavoz manifestó que el escaso suministro de repuestos complica aún más la situación. “Cuando se alquila el Auditorio, siempre se informa a los interesados sobre el estado de los equipos de refrigeración”, afirmó Sanz, enfatizando la responsabilidad del Ayuntamiento en la gestión de esta problemática.

Además, Sanz aclaró que cuando se realizan eventos en el Auditorio, los asistentes deben estar preparados, ya que los sistemas de aire acondicionado no están operativos y dependerán de ventiladores para mitigar el calor. Esta limitación ha llevado a las autoridades a priorizar la salud de los ciudadanos al tomar la decisión de cancelar ciertos eventos durante la ola de calor.

Es importante destacar que una de las actividades suspendidas incluía acrobacias, lo que llevó a la conclusión de que la actividad física no sería segura dadas las condiciones del entorno. Aunque no se prevé una solución inmediata a largo plazo, el Ayuntamiento está trabajando en explorar alternativas que puedan mejorar la situación en el futuro.