Sáinz defiende la decisión de Ayuntamiento de adaptar espectáculo al público y horario.

El Ayuntamiento de Logroño ha tomado la decisión de cancelar un espectáculo humorístico programado para el festival CUCO, titulado 'Despotorre', en respuesta a la reclamación pública de Vox. El concejal de Promoción de la Ciudad, Miguel Sáinz, ha subrayado que, a pesar de las críticas, la decisión final reside en el Ayuntamiento.

LOGROÑO, 30 May.

El edil ha defendido el derecho del Ayuntamiento a modificar la programación en cualquier momento para adaptarla al público y al horario en cuestión. La solicitud de Vox para eliminar el espectáculo, alegando que ridiculiza el aborto y el terrorismo, ha sido desestimada por las autoridades locales.

Según Sáinz, la cancelación se basa en garantizar un contenido familiar y adecuado para el evento, priorizando la comodidad y el entretenimiento del público asistente, especialmente los niños.

En lugar de 'Despotorre', se ha programado un nuevo espectáculo protagonizado por una monologuista riojana, con un enfoque más familiar y apropiado para la audiencia prevista en el festival CUCO.

Sáinz ha reiterado que la decisión de cambiar la programación no es una forma de censura, sino una medida para ajustar el contenido al público objetivo y preservar la armonía del evento.

La modificación de la programación ha sido parte de la revisión en curso de los diversos espectáculos dentro del festival CUCO, con el objetivo de garantizar que el contenido sea adecuado y respetuoso para toda la familia.

En este sentido, se ha destacado que los monólogos continuarán celebrándose en un ambiente normal y acogedor, bajo la fórmula CUCO que promueve la diversidad cultural y artística.

El concejal ha expresado su respeto por los artistas y su trabajo, enfatizando la importancia de adaptar los contenidos para el público infantil y familiar en eventos públicos financiados con fondos municipales.

El reajuste de la programación ha sido resultado de un proceso de selección y licitación realizado en colaboración con la Cámara de Comercio, con el objetivo de asegurar que los espectáculos sean apropiados y atractivos para la audiencia prevista.

En conclusión, el Ayuntamiento ha defendido su derecho a modificar la programación en cualquier momento con el fin de garantizar la adecuación del contenido al público y al contexto del evento, sin interferencias externas en la gestión y organización de los espectáculos públicos.