La plataforma vecinal del Casco Antiguo ([email protected]) ha dirigido una solicitud al alcalde de Logroño, Conrado Escobar, donde piden que se asegure públicamente de que las recientes ampliaciones de licencias medio ambientales y de obras que ha concedido no permitirán que los locales cambien de cafetería-bar a café-concierto y se conviertan en discotecas encubiertas con aumentos significativos de aforo, incluso multiplicándolos por cuatro.

El grupo vecinal también ha solicitado al alcalde que detenga de inmediato la autorización de nuevas terrazas, en línea con la moratoria anunciada previamente, ya que continúan otorgándose permisos como el que se concedió recientemente para una hamburguesería en la calle Once de Junio.

Los residentes han expresado su descontento con las acciones de Escobar, quien hace una semana presentó un plan de "choque" para mejorar la habitabilidad del centro histórico, incluyendo una moratoria en la instalación de nuevas terrazas y bares, pero sigue autorizando lo contrario mediante resoluciones de Alcaldía, como la ampliación de licencias de ciertos locales hosteleros.

Además, se ha cuestionado si las recientes ampliaciones de licencias detectadas son indicativas de una estrategia por parte del sector del ocio nocturno para eludir las normativas municipales y las restricciones sobre la instalación de discotecas en el área urbana. Se espera que el Ayuntamiento aclare esta situación.

Los vecinos han expresado su preocupación en relación a la capacidad de ciertos locales con superficies limitadas para albergar una cantidad tan grande de personas. Exigen que los técnicos municipales y de la Comunidad Autónoma sean minuciosos en términos de insonorización, seguridad y planes de evacuación para evitar situaciones peligrosas.

Ante la situación crítica en el Casco Antiguo, la plataforma vecinal ha exigido la suspensión inmediata de la concesión de nuevas licencias y de aquellas en proceso que impliquen ampliaciones de categoría. Se insta al Ayuntamiento a cumplir con la legislación de manera efectiva y a declarar la zona como saturada y de especial protección acústica.

El grupo vecinal está comprometido con la revitalización del centro histórico, abordando diversos problemas que van desde el ruido y las terrazas hasta la falta de limpieza, el incivismo, y el caos en la gestión de residuos. Su objetivo es mejorar la calidad de vida en esta zona emblemática de Logroño.