De instante hay un antiviral aprobado por la EMA 'Paxlovid' pero "tiene un problema" y sucede que "no lo puede tomar todo el planeta"

LOGROÑO, diez Jul.

Tras mucho más de un par de años de pandemia, el médico y instructor de UNIR, Vicente Soriano, aseguró que "lo esperable" con el coronavirus es que "cada vez sea mucho más transmisible pero menos grave" gracias, en parte, a la "inmunidad residual" de la población que lo ha sufrido o se ha vacunado. Además, pone el acento en la relevancia de la comercialización de los tratamientos antivirales que van "con lentitud" pero "con paso estable".

En un nuevo ámbito de incremento de contagios, olas y novedosas variaciones, el enseñante de UNIR explicó que en este momento se advierten mucho más casos merced a la sencillez para conseguir un test de antígenos; "en este momento a la menor sintomatología o duda, nos hacemos una prueba y eso asiste para entender si nos encontramos enfermos o no" pero, más que nada, es porque "desde la última dosis de refuerzo de la vacuna para bastantes de nosotros ahora pasaron varios meses y la inmunidad protectora no dura mucho más de 4 o 6, por ende, somos mucho más susceptibles de infectarnos".

Lo "bueno" -dijo- "es que en este momento las situaciones no son graves". En este punto, ha señalado, "en este momento la gente inficionadas por covid lo aprecian, más que nada, en la nariz, tienen la posibilidad de tener algo de conjuntivitis, tos, mocos... pero todo ello son en cuadros de vías respiratorias altas. Antes, en el momento en que no había ni inmunidad ni experiencia anterior, el virus llegaba hasta el fondo del pulmón y se producían neumonías o pulmonías muy graves... y bueno, ahora entendemos todo cuanto hemos vivido".

"Esto en este momento no sucede pues hay una alguna inmunidad residual y todo se queda cerca de la nariz y la boca pero la verdad es que no es una inmunidad esterilizante, deseo decir, no eludimos los contagios con las vacunas, eludimos las formas graves", ha matizado el asimismo médico experto en Enfermedades Infecciosas y instructor y también estudioso primordial del conjunto 'Medonline' de UNIR.

Así, dijo, "en estos instantes los que están hospitalizados son personas mayores con otras nosologías esenciales de base y que, además de esto, dan positivo por covid, pero en la mayor parte de las situaciones el virus no es la causa de su ingreso".

De cara al próximo otoño, el instructor de UNIR considera "esencial" ir construyendo un plan de acción o estrategia para poder ver de qué manera debemos realizar la campaña de la vuelta de vacaciones, regresar al instituto, a la facultad... entender qué llevar a cabo en el momento en que llegue el frío y estemos en sitios cerrados.

Entre esas tácticas cree "primordial", por una parte, tener una dosis de refuerzo de la vacuna que esté actualizada para las cepas recientes, Ómicron, BA.4 y BA.5 que son "muy transmisibles" y por otro, meditar tácticas para hacer más simple el ingreso a los nuevos tratamientos antivirales.

Aunque en España todavía no se comercializan, Soriano explicó que estos tratamientos todavía deben bajar de precio, se tienen que prescribir por un médico y, al final, que se vendan en farmacias.

"En Estados Unidos ahora están en venta y aquí ahora hay uno que está aprobado por la Agencia Europea del Medicamento pero entonces cada país debe negociar el valor". Así, ha insistido, "en este preciso momento solo hay un antiviral oral eficiente" que es el creado por Pzifer que lleva por nombre 'Paxlovid' pero "tiene un problema" y sucede que "no lo puede tomar todo el planeta".

"La gente que toman sintrom, antiarrítmicos o antipsicóticos, por servirnos de un ejemplo, no tienen la posibilidad de llevarlo a cabo de ahí que es esencial que lo prescriba el médico y que éste sepa todas y cada una de las contraindicaciones".

En la situacion de España, indicó, "vamos a seguir las directivas de la UE, vamos un tanto después pero para octubre sería bueno que se empezara a tener ellos".

En estos instantes, ha señalado, "estamos en un ascenso de una exclusiva variación de Ómicron, que se hizo con todo el coronavirus y sus subvariantes BA.4 y BA.5".

En la situacion de Ómicron "se puede traducir como un catarro de las vías respiratorias altas que puede ocasionar faringitis, cefalea, fiebre... todo rapidísimo pero con muy poca afección de trato respiratorio inferior (neumonías o pulmonías)".

Por tanto, dijo, Ómicron se semeja mucho más a la gripe y "deberíamos tener una actitud similar a la de la gripe, con su vacunación actualizada todos los años y entender que el virus va a proseguir ahí y que va a proseguir mudando pero lo esperable es que sea mucho más transmisible pero menos grave".

Con el repunte de casos, y frente a la oportunidad de que vuelva la mascarilla en interiores, el especialista de UNIR enseña que "si se decidiese de esta manera se chocaría con una sección esencial de la población" lo destacado -a su juicio- sería "detectar los subgrupos de la población que se tienen la posibilidad de favorecer de esas medidas" si bien como ha reconocido "en espacios cerrados o con aglomeraciones sí que serían útiles pero... si tu vuelves a decir 'máscaras para todos', tendrás a un conjunto en contra esencial".

Como ha meditado: "Ya es mucho más un tema de compromiso personal. Uno sabe qué realizar o no si tiene el virus o si tiene sospecha de poseerlo".

Aún de esta forma, concluye, "hay formas de proceder que han venido para quedarse, como por poner un ejemplo, la utilización de las máscaras en determinados espacios, como el que transporta guantes en el momento en que tiene frío o sombreros... sea como sea se debe tener independencia para lograr realizar lo que uno crea favorable mientras que no moleste al otro. La independencia es primordial".