LOGROÑO, 2 Ago.
El Ayuntamiento de Logroño ha puesto 12 reductores de agilidad en distintas calles de Logroño con la meta de "hacer una movilidad mucho más segura" tal como "aliviar el tráfico", según explicó el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero.
Caballero ha anunciado esta mañana esta intervención desde la calle Cabo Noval 12, entre los puntos dónde se han instalado estos reductores de agilidad o 'lomos de asno'.
La colocación de estos reductores, explicó, "se hizo teniendo en cuenta esos viales periurbanos donde se habían detectado excesos de agilidad", lo que paralelamente provocaba "un exceso en los escenarios de estruendos y peligrosidad".
"Estos reductores tratan de rememorar la obligación de respetar los límites de agilidad", indicó el concejal señalando la "motivación primordial" de impulsar la restricción de agilidad a treinta km por hora, recordando de esta forma "que estos viales están en ámbitos urbanos, dónde viven y recorren personas, ciertas de ellas atacables".
Estas proyectos de calmado de tráfico a través de reductores de agilidad han supuesto una inversión de 79.293,05 euros (IVA incluido), llevadas a cabo por la compañía Antis Obra Civil, S.L., y que se encuadran en el convenio marco que el Ayuntamiento tiene para la adecuación, renovación y optimización de infraestructuras.
Los distritos por dónde se ha extendido está actuación son El Campillo (calle Cabo Noval 12); El Cubo (General Urrutia 83); Yagüe (calle Pamplona); Valdegastea (Rumanía, cruce con calle Irlanda); Varea (en calle Calahorra en oposición al Polideportivo, y en la calle Canicalejo); en Montesoria 4,8,12 y 14; y en el Camino Viejo de Alberite.
Se trata de 12 actuaciones "pedidas por las asociaciones vecinales en múltiples asambleas tenidas previamente con ellas", indicó Caballero.
Asimismo, el concejal ha recordado: "En las medidas de calmado de tráfico asimismo se están haciendo múltiples pasos peatonales superiores, como el que se está finalizando en la calle Vara de Rey, o los que se están empezando en Avenida Club Deportivo, San Adrián o Avenida de Navarra".
Finalmente, Caballero explicó de qué manera la eficiencia de estos reductores en comparación con un paso peatonal alto "es afín", resaltando que la diferencia recae sobre el coste de cada uno de ellos.
"Pudimos llevar a cabo, con un presupuesto de 79.293,05 euros, 12 reductores de agilidad, al tiempo que un paso alto es considerablemente más caro de realizar", explicó.
Ha señalado de qué forma "tratándose de sitios que no son de itinerario peatonal, que no están en sitios de tránsito, es mucho más efectivo efectuar estas actuaciones".
